A Asun, Maestra
en la Tribulación.
La gente vive de preocupación en preocupación. De
problema en problema. De angustia en angustia.
La preocupación
es la ocupación de la mente que atormenta las personas que no trabajan en el
despertar de la Consciencia. De los que
pierden la Autorrecordación íntima. Los que se olvidan de su Ser.
Los que pierden la conexión con el Ser siempre andan
preocupados. Andan asfixiados. Sin el Oxígeno vital que concede el equilibrio
psicoemocional. Andan atormentados con una diarrea mental inacabable. Tóxica. Que funciona como el telar de Penélope, de día teje, y de noche desteje, y
al día siguiente están en el mismo sitio del día anterior. Repitiendo lo
mismo. Ahogándose y tratando de ahogar a los demás en su propio mar de problemas.
Toda preocupación es causada por los aires vitales,
que sin control psicológico alguno, forman devastadoras tempestades en la mente
subjetiva del ser humano. Como en el pasaje bíblico, esas tempestades
únicamente puede disiparlas el Cristo. Esa es la enseñanza que deja esa parte
del Evangelio de Lucas, capítulo 8. 23,24.
Solo al Cristo
debes acudir para que te ayude en tus tribulaciones. Por tanto, lleva tus aflicciones al sacrificio de
la Cruz, en acto de la conexión tántrica, y pon allí toda tu Fe, entregando tus
angustias. Ocúpate sabia y confiadamente
en las energías renovadoras allí
procesadas y resuelve con ellas tus problemas. Por eso, no te preocupes.
No te preocupes por la comida, ni por el vestido,
porque la palabra de Dios es palabra de Verdad y de Fe, y en el Salmo 37, su
promesa nos dice: “No he visto justo en
ruinas, ni sus hijos mendigando el pan.”
No te preocupes “Cuando
te calumnien y te vituperen o aborrezcan por causa del Hijo del Hombre; más
bien, gozaos en aquel día porque os digo que grande es vuestro galardón en los
cielos.” Lucas, 6. 22,23. Por eso, más bien ocúpate de mantenerte firme en
la tempestad urdida en tu contra. Pide fuerzas a Dios, perdónalos y sigue tu
camino.
No te preocupes porque hay más de 2.000 religiones y
un solo Dios verdadero. Más bien ocúpate
de practicar la religión del Amor, porque esa es la verdadera. En la que
transmutando tus energías, durante el acto puro y santo, te reconcilias con
Dios. Con el verdadero Dios, que es el Dios Vivo que mora en tu templo.
No te preocupes por el día de mañana. Por qué
comerás y qué harás. Más bien concéntrate en que “Cada día trae su propio afán.”
No te preocupes
en juzgar a los demás. ¡No seas necio! No le quites el trabajo a Dios.
No te preocupes por el Hercolubus, porque preocupándote o no, el vendrá solito, en su día y en su hora. Más bien ocúpate de rectificar tus errores, de buscar los caminos de Dios y de permanecer en ellos.
No te preocupes de volar. Más bien ocúpate de preparar tus alas y empieza a
flotar en la vastedad del constelado espacio infinito.
No te preocupes por tu felicidad. Más bien ocúpate de transformar tus defectos en
virtudes. Porque con el ego vivito y robustecido no hay felicidad posible.
Tú lo sabes.
No te preocupes por tanta cosa vana e intrascendente.
Cosas que no valen la pena. Más bien ocúpate de lo imperecedero, de lo
transcendental, de lo eterno. Tu alma es
eterna, por eso, debes llenarla de fuego eterno. No la atormentes con
nimiedades. Acuérdate que: “Toda obra,
cualquiera que sea, será probada por el fuego”, así dice la Biblia, en
1Corintios, 3. 13.
No te preocupes cuando en tu misma familia te
critiquen y se burlen de ti, de tu Fe y de tus prácticas. Más bien comprende
que nadie es profeta en su pueblo.
Comprende que para el mundo degenerado y concupiscente en que habitamos, el verdadero cristiano, el gnóstico, es
anormal. Lo normal es ser corrupto, inmoral, fornicario, adultero, egoísta,
materialista, mentiroso, criticón, incrédulo y odioso. Eso es lo normal. Pero eso también es lo que te lleva a abismos de
perdición.
No te preocupes de tu vida física. Ocúpate de tu vida espiritual, porque
es el Espíritu el que da vida al cuerpo y el que lo sustenta. El Espíritu predomina sobre la materia.
Aprende más bien, a cargar tu Cruz, porque solo con ella puedes llegar a Dios.
Pero no con la falsa Cruz, sino con la verdadera. La Cruz del Amor del Cristo, de la cual habla la Biblia en
1Corintios, al decir:
“Porque la
palabra de la Cruz es locura a los que se pierden; pero a los que se salvan,
esto es, a nosotros, es poder de Dios.”
Y también: “Y
mediante la Cruz reconciliar con Dios a ambos (a los cónyuges) en un solo
cuerpo, matando en ella las enemistades,” (los defectos). Efesios, 2.16.
Observe el lector que, la Iglesia de Efeso, es el chacra Muladhara, donde
habita el Kundalini. Observe, además, que la suma del capítulo, más el
versículo, da 9, que es el número del Arcano AZF. Recordemos que las
casualidades no existen. “El que tenga
entendimiento, que entienda, porque aquí hay sabiduría.”
Hermano, desarrolla una disciplina inquebrantable.
Haz tus prácticas con Fe y honradez y no te preocupes por los resultados,
porque la Ley Divina no se queda con nada. Recuerda que, “No es la fuerza de la gota la que rompe la roca, sino su
persistencia.” “En toda labor hay un fruto. Y en todo fruto una labor.”
No te preocupes por el Cristo histórico, porque él
vino hace 2.000 años, hizo su trabajo misional. Dió sus Sagradas Enseñanzas,
rasgó el Velo del Templo y abrió los caminos a las Tierras de la Luz. Con su
sangre redentora firmó el Nuevo Pacto entre Dios y los hombres. Más bien ocúpate de tu Cristo Íntimo, cuyos
principios fohaticos y virtudes están retenidos en los infiernos, debido a tus
propios errores, a tu rebeldía, tu incredulidad y a tu dormida Consciencia. Ocúpate más bien de trabajar en la muerte psicológica
y empieza a rescatar valores, a liberar al Cristo Íntimo que sufre espantosa
agonía, esperando ascender a tu propio cielo.
Para rescatar valores, te brindamos una práctica especial con el Cateador Eneagrama, una
parte autónoma y autoconsciente de tu Ser, experta en rescatar valores
Conscientivos. La CLAVE DANTE, que sirve
para descender a tus propios abismos y empezar a sacar valores sumergidos.
No te preocupes
por tus miedos. Ocúpate de enfrentarlos poco a poco. Pide
auxilio en la tierra y en los cielos. A los profesionales del alma, a tu
Padre, al Cristo, Redentor, al Espíritu Santo, a la Madre Divina y a los Coros
Celestiales del Arcángel Rafael para que superes tus miedos.
No te preocupes por cambiar el mundo. Mejor ocúpate de cambiar tu propio mundo.
La verdadera Gnosis no es de redes sociales. No te
preocupes por la guerra de información que hay en las redes, porque en el
fondo, es guerra de intereses, y en ella, tú puedes ser la primera víctima. Eso
es Infodemia. Mejor ocúpate de buscar la Verdad.
No te preocupes por la maldad que ahora desborda
toda actividad humana. Ocúpate en sacar
lo bueno de lo malo. Ocúpate en hacer el bien. Quien ve el bien hasta en los más pequeños
detalles, empieza a vibrar con lo bueno. Empieza a atraer lo bueno hacia sí mismo.
Y su vida cambia llenándose de agentes del bien y vibrando en octavas más
elevadas en todas las actividades de su Ser y de su quehacer.
Deja caer tus
problemas en manos de tu Padre Eterno. Vuélvete liviano como una pluma que
flota en la inmensidad de la bóveda celeste. No
te preocupes porque tu Padre Eterno, como buen Padre escogerá para ti la mejor
decisión, pues tú eres su hijo, su manifestación sagrada en esta tercera
dimensión. Siente que tu Padre te ama
desde siempre, desde antes de nacer. Desde la eternidad. Por eso, no dejes de orar, de suplicarle su
ayuda, su misericordia, su bendición.
En esta Semana Santa, busca la Paz de Dios, que se manifiesta y canaliza por su Hijo
Jesús el Cristo, él es la Paz. En un mundo de tribulación y que atribula a
todos, permanecer en la Paz de Dios, es
una gran bendición. Es un tesoro que los ricos no pueden comprar. La Paz del alma, la Paz del corazón,
la Paz del Espíritu, solo adviene a ti en ausencia del ego, por lo menos,
cuando logras alejarte de él. Recuerda la sabia palabra del Sacerdote que te
consagró: “Debes despojarte de todo lo
que brilla con reflejo engañoso.”
La Gnosis es una doctrina de salvación y realización
plena del alma. Es una Doctrina Universal, Infinita y Eterna. La Gnosis es la
Verdad de instante en instante. He allí por qué el Maestro Jesús dijo:
“Buscad la
Verdad y ella os hará libres.”
Que la Verdad que es el Padre, nos bendiga y ayude a
permanecer en él, por los méritos infinitos de Nuestro Señor el Cristo.
Amén. Amén. Amén.
GNOSIS DE VANGUARDIA
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