(REFLEXIÓN XXVIII)
Samael
es el Quinto de los Siete Espíritus ante el Trono del Cordero Divino.
Samael
enseña el Quinto Evangelio.
Samael
ayuda a formar el Quinto punto de luz en la Estrella Matutina.
El Quinto punto de luz es el Cristo en cada uno de nosotros. Esa es la fragante Rosa Roja de los antiguos Rosacruces.
Los
Cuatro Evangelios dicen qué hay que hacer. Por ejemplo: “Ascender a los cielos
es cardinal y necesario.” Pero sólo la doctrina del Avatara Samael, enseña cómo
ascender a los cielos y cuáles son los cielos.
No te dejes engañar de nadie. Los gnósticos samaelianos comemos el verdadero Maná, el que da la vida eterna. No el Maná falso que comieron nuestros padres en el desierto y murieron.
Estamos en la Quinta y última etapa de la Gnosis. El Quinto Ángel en la Quinta etapa de su gloriosa Misión.
Hermano,
sal de tu antigua morada. Deja de seguir personalidades humanas, de grupitos
fanáticos anquilosados en el tiempo. Deja de mirar para atrás. No te conviertas
en estatua de sal. Convertirse en estatua de sal es convertir la sabiduría en
piedra, en algo inútil porque la sabiduría es dinámica, como el Cosmos
infinito. Es aquí y ahora. De instante en instante. No petrifiques tu sabiduría. Practícala.
Vívela. Compruébala. Enséñala. Asciende
con ella hacia lo alto, hacia la Luz.
Este
es el tiempo exacto de construir tu propia trinchera, con tu propia tribu, con
gente de linaje sagrado. Necesitas estar preparado para el combate final.
Tiempla
y retiempla la espada de tu voluntad y
prepárate, porque vamos a luchar juntos contra las huestes del mal.
Te
recuerdo el Himno de los Valientes cuando dice :
"Adelante,
guerreros de Acuario,
Samael
ya nos manda a formar,
Adelante
a iniciar el temario,
Por
el Cristo, adelante a triunfar. "
GNOSIS
DE VANGUARDIA
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